Elegimos a la persona que amamos, decidimos construir con ella un proyecto de futuro, compartimos momentos y decidimos casarnos. Pero un día te das cuenta de que la relación no es la misma, las discusiones son continuas, no hay comunicación o simplemente ya no sientes amor por esa persona. No existe una única razón para el divorcio, sino que es una combinación de varias cosas. En la actualidad, el número de divorcios va en aumento y muchas veces, es la única solución para no terminar en conflicto con quién fue tu compañero, y con quien viviste tantas cosas. Si tienes hijos, debes tener claro que ellos perciben todo lo que sucede en el seno familiar, no fuerces una relación que no funciona por tus hijos, ya que lejos de protegerlos, haces que ellos vivan el conflicto. Aquí te daremos algunas recomendaciones para saber si te tienes que divorciar.
Búsqueda de soluciones. Antes de tomar alguna decisión, asegúrate de buscaste todas las formas posibles para mejorar la situación. La comunicación es una de las bases de toda relación. Si no lo has hecho, habla con tu pareja acerca de lo que ocurre e intenten arreglar los problemas, proponiendo cambios y adoptando una nueva actitud. Si ya han pasado por esta etapa y no ha cambiado la situación, comienza a evaluar la opción del divorcio.
El sentimiento cambio. Si sientes que ya no hay amor en la pareja, la solución más sana es la separación. Uno puede intentar salvar una relación cuando los problemas son de otra índole, pero cuando el amor se fue, tienes que soltarlo y seguir adelante.
Discusiones destructivas. Si las discusiones son recurrentes, y durante las mismas hay una falta de respeto continua, inflexibilidad por parte de ambos, incapacidad para ponerse en el lugar del otro, hay algo que no esta funcionando. Si han conversado acerca del tema y sin embargo, el trato durante las discusiones sigue siendo el mismo, tienes que pensar en alejarte de esa situación. La falta de respeto no conduce a ningún otro lado más que a la separación.
Falta de creatividad. Muchas veces, la rutina diaria conduce al abandono de sí mismo y del cuidado de la pareja. Es importante que la pareja sea creativa para alimentar el amor que se tienen. Esto es algo que se debe hacer todos los días, ahora si la rutina ya los invadió y no sienten el deseo de cambiarla o intentar cosas nuevas, o ya lo han probado, la relación se encuentra en crisis y puede ser difícil poder salir de ella.
Caracteres incompatibles. Muchas veces, resulta difícil sobrellevar el carácter de la otra persona más allá del amor que pueden sentir. Puede que suceda que sus discusiones sean fundamentalmente por las reacciones que tienen y no por los hechos.
La imposibilidad de superar problemas ajenos a la pareja. Muchas veces los problemas externos a la pareja son trasladados a la relación, como por ejemplo los problemas laborales. Es por eso, que muchas veces, existen enojos por situaciones externas a la pareja, si esto se manifiesta en forma continua puede desgastar la relación.
Falta de respeto. Si la relación se caracteriza por las agresiones constantes por parte de uno o ambos, por situaciones que generan un clima tenso, debes actuar ahora mismo. También puede suceder que alguno de los dos haya cometido infidelidad o haya mentido en reiteradas ocasiones acerca de determinadas situaciones. Todas estas situaciones son nocivas y tóxicas. Muchas veces la solución en estos casos es el divorcio, es necesario promover un ambiente sano y más si hay niños en la familia.
Celos y aislamiento. Si tu marido o tú tienen celos desmedido frente a situaciones injustificadas y le transmiten este sentimiento a la pareja, también le están transmitiendo desconfianza. La confianza se construye con el tiempo y los celos irracionales la destruyen en un momento. También puede suceder que intente aislarte de tu entorno para tener más control sobre ti, en estos casos no solo te tienes que separar lo antes posible, sino que también debes buscar ayuda.
Tu familia también lo vive. No evites tomar la decisión por tus hijos, ellos están ahí todos los días y viven la situación como tú. No permitas que ellos crezcan en un clima tenso, lleno de discusiones, ellos lo aceptarán con el tiempo.
Consejos
- Puedes acudir a una terapia de pareja si quieres reconducir la situación con tu pareja y asegurarte si el paso deseado es el divorcio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario