miércoles, 14 de diciembre de 2011

CUESTIÓN DE ACTITUD


Hay que aprender a aceptarnos como somos. Los estándares inalcanzables de éxito y belleza, vuelven a las personas infelices

Miguel Ruiz, autor del best seller Los cuatro acuerdos, explica la manera en la que inconscientemente ponemos osbtáculos al verdadero amor.

“Tendemos a condicionar para darlo, incluso a nosotros mismos. Por ello, nos convertimos en seres celosos y posesivos. No puedes decirle a alguien ‘te amo’ y pretender cambiarlo. Eso no es amor verdadero”, señaló.

El amor real nace a partir de la aceptación que cada persona tiene para consigo misma. Para Miguel Ruiz, el cariño que se expresa hacia alguien más no es sincero si no se siente por uno mismo antes.

“En realidad, no necesitamos que nadie nos ame. Eso es sólo una consecuencia de cómo nos sentimos personalmente. El amor debe comenzar desde nuestro interior para que se refleje en lo que nos rodea. Amarnos no significa egoísmo.

“El afecto que decimos tenerle a los demás es condicional. Es un círculo vicioso de control, si podemos controlar al otro entonces lo queremos, si no, no. La gente se concentra en una imagen utópica de sí misma y como no la consigue, se siente culpable, avergonzada y odiada”, comentó Ruiz.

La sociedad ejerce una gran presión sobre las personas para alcanzar una imagen ridícula de la perfección. En cada ámbito, se obliga a los seres humanos a cumplir con ciertos estándares imposibles de éxito, belleza y actitud, convirtiéndolos en entes infelices y reprimidos al resultar incapaces de alcanzarlos.

“Nos comportamos de cierta manera para ser aceptados. Dejamos de ser auténticos y comenzamos a pensar que amar nos hace débiles. La mentira es uno de los factores negativos que enfrentan las personas en la actualidad. Es una limitación para demostrar lo que verdaderamente somos”, expresó.

Amar es un arte

Como en cualquier disciplina, la práctica hace al maestro. Si pretendemos generar un cambio, debemos tener paciencia y disposición para darle continuidad. Hay que recordar que se trata de una labor de persistencia y no de varita mágica.

“El amor propio es resultado de la práctica. Se logra con el día a día, pero lo primero es intentarlo. Como en todo, se cometerán errores al inicio y, posteriormente, con el ejercicio diario se lograrán los cambios. Estamos acostumbrados a ver el lado negativo, pero también podemos hacerlo con lo positivo”, comentó el experto.

Miguel Ruiz ha afirmado que la metamorfosis se da a través de la conciencia de nuestras palabras, de no tomar nada personal, de evitar las suposiciones y de dar siempre lo mejor. De esta forma, es posible prosperar en los diferentes ámbitos vivenciales.

“En cuanto te das la oportunidad de sentir amor propio, comienzas por respetarte a ti mismo. Tu vida cambia, la forma en la que te desenvuelves, te conviertes en una persona exitosa porque estás consciente y orgulloso de lo que eres.

“La felicidad es una elección. Si decides ser feliz, lo serás. Debes darte cuenta de que todo lo que has hecho en tu vida es resultado de una alternativa”, señaló el autor mexicano.

Hacia la transformación personal

Actualmente, Miguel Ruiz se encuentra inmerso en la misión de cambiar al mundo. Pero como él mismo lo dice, “no se trata de cambiar el planeta, sino lo que somos”.

“El maestro de la sabiduría tolteca”, como también le llaman, afirma que la interacción se divide en dos partes. La primera corresponde a nosotros mismos y la segunda al resto de la gente. Lo ideal es variar la nuestra y no la de los demás.

“Nosotros creamos y vivimos en nuestro propio mundo. Eres responsable de todo lo que sucede en él y si no te gusta, siempre tendrás la oportunidad de cambiarlo. Lo que enseño no es algo nuevo, tiene miles de años.

“La clave está en que la gente se encuentre dispuesta a intentarlo. En la actualidad existen muchos autores, especialistas y conocedores que pueden brindarte las herramientas, pero el primer paso lo da cada individuo. Sólo de esta forma puedes alcanzar la verdadera felicidad”, finalizó.

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